Astrónomos estadounidenses han anunciado hoy que el telescopio espacial Hubble ha captado la primera imagen fotográfica con luz natural de un exoplaneta (que orbita alrededor de otro sol) a sólo 25 años luz de la Tierra, en la constelación de Piscus Austrinus. La imagen muestra el sistema planetario en su totalidad formado por un cinturón de polvo y escombros cósmicos junto al exoplaneta, llamado Formalhaut b, cuyo movimiento de traslación en torno a la estrella dura 872 años terrestres.
Los exoplanetas, según la definición científica, son cuerpos que giran en una órbita permanente alrededor de una estrella pero más allá del sistema solar. Hasta ahora se había determinado la existencia de unos 300 exoplanetas, pero nunca se había conseguido captar la imagen de uno de ellos con luz natural.
En una conferencia de prensa en Washington los científicos, que han publicado su informe en la revista Science, han indicado que el exoplaneta tiene probablemente la masa de Júpiter y gira en la órbita de una estrella identificada como Formalhaut. Podría tener un sistema de anillos similares a los que rodearon a Júpiter y que después se condensaron para formar lo que son ahora sus lunas.
Los primeros indicios de la existencia de un exoplaneta en la constelación de Piscus Austrinus aparecieron en 2005 cuando el astrónomo de la Universidad de California, Paul Kalas, analizó imágenes tomadas por la cámara avanzada del telescopio espacial Hubble que mostraban un borde de material muy definido en torno a la estrella.
Planetas más allá de la Vía Láctea
Aunque no todos han sido vistos, este tipo de planetas abundan más allá de la Vía Láctea, como lo demuestra otro equipo de astrónomos estadounidenses que descubrió tres en ellos que giran en torno a la estrella HR 8799, a 130 años luz de la Tierra. Para ese descubrimiento los astrónomos del Observatorio Lowell, en Arizona, utilizaron los telescopios del observatorio de Mauna Kea, en Hawai, y una avanzada técnica informática que les ayudó a separar esos cuerpos de la luz de su estrella.
También desarrollaron modelos teóricos para determinar la estructura de su atmósfera y de su interior así como la edad de la estrella y los planetas que sería de unos 60 millones de años (jóvenes en términos astronómicos). Según Christian Marois, coautor del estudio publicado en Science, la estrella HR 8799 es “una mina de oro” que permite formular teorías sobre la formación de los planetas, su evolución y su física atmosférica.
Fuente | El pais
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si la entrada te resultó interesante o quieres comentar algo respecto a la noticia, puedes dejar aquí tu comentario